Así mismo Ideocalm® contiene triptófano, producto natural, y aminoácido esencial con una función muy importante, ya que ayuda a regular los niveles adecuados de serotonina en el cerebro. Tiene un efecto ansiolítico y antidepresivo. Activa la melatonina natural. Producto muy necesario en pacientes con tinnitus.
Otro de los componentes de Ideocalm®, el Ginkgo Biloba, podemos considerarlo como un excelente vasorregulador que mejora el flujo sanguíneo, ya que posee acción vasodilatadora arterial y acción vasoconstrictora a nivel venoso. A la vez que refuerza la resistencia capilar, aumenta el riego sanguíneo, mejorando la microcirculación sanguínea de los nervios, disminuyendo el estrés oxidativo por su potente efecto antioxidante, favoreciendo así la función auditiva en general. El Ginkgo Biloba, que contiene Ideocalm®, son hojas de extracto seco con 24 % de Flavonoides y 6 % de lactonas sesquiterpénicas. El más potente y saludable. Único en el mercado.
Tenemos, por consiguiente, disponible en nuestras farmacias un producto con una formulación muy completa y exclusiva. Hemos conseguido incluir las dosis máximas que permite Bruselas de cada principio activo en una sola cápsula/toma diaria, esto nos asegurará el cumplimiento terapeútico a cargo del paciente y la máxima eficacia por toma. Todos sus componentes realizan una acción sinérgica entre sí. No tiene efectos secundarios y se puede utilizar conconmitantemente con otros tratamientos. Al no existir estudios que demuestren secundarismos, garantizamos su total seguridad.
¿Sufres alteraciones, ruidos u otro tipo de problemas en tu oído?
¿Has sido diagnosticado anteriormente de acúfenos o tinnitus?
¿Necesitas subir siempre el volumen de tu televisión?
¿Pides que te repitan las cosas porque no oyes?
¿Sufres de vértigos, mareos o inestabilidad?
GINKGO BILOBA, HOJAS EXTRACTO SECO: 24% FLAVONOIDES, y 6% LACTONAS SESQUITERPÉNICAS
Se recomienda utilizar un extracto de Ginkgo Biloba valorado al 24% en flavonoides y al 6% en lactonas sesquiterpénicas, debido a que estos compuestos son los responsables del efecto que se quiere buscar con el producto, como se indica a continuación. Los extractos comunes de Ginkgo están valorados al 24% en flavonoides, pero su concentración en lactonas sesquiterpénicas es muy baja, no estando valoradas.
Los extractos estandarizados contienen del 22-27 % de heterósidos flavónicos y 5-7% de lactonas terpénicas, de las cuales 2,8-3,4% son ginkgólidos A, B y C y 2,6-3,2% bilobálido.
Acción farmacológica: La hoja de ginkgo presenta actividad vasorreguladora (vasodilatador arterial, vasoconstrictor venoso y reforzador de la resistencia capilar, aumento del flujo sanguíneo), antiagregante plaquetario antagonista del PAF (factor activador de las plaquetas); aumenta la tolerancia a la anoxia (aumento de la captación de glucosa y oxígeno y disminución de los requerimientos de oxígeno a nivel cerebral); antioxidante y neuroprotector.
El extracto de Ginkgo Biloba también ha sido efectivo en el tratamiento de edema cerebral inducido por agentes neurotóxicos, actividad en la que el bilobálido parece tener un papel significativo. A nivel auditivo, el extracto de ginkgo por vía oral, mejora la calidad ultraestructural del epitelio sensorial vestibular en animales, debido a su efecto sobre la permeabilidad capilar y la microcirculación general.
MAGNESIO, TRIPTÓFANO, ZINC Y VITAMINA B6
El Magnesio es esencial para la función de las enzimas importantes, incluyendo las relacionadas con la transferencia de grupos fosfato y cada paso relacionado con la replicación y transcripción del ADN y la traducción del mRNA. El déficit de este mineral a nivel vestibular, es responsable de las pérdidas auditivas.
También se requiere este catión para el metabolismo de la energía celular y tiene un papel importante en la estabilización de la membrana, la conducción nerviosa y el ion transporte. Su deficiencia puede ocasionar una variedad de anormalidades metabólicas y consecuencias clínicas, incluyendo tinnitus. El magnesio se ha demostrado eficaz para prevenir la pérdida de audición en un estudio realizado por Attiaset et al….
Estudios recientes sobre la pérdida auditiva neurosensorial inducida por ruido, han demostrado que el magnesio puede disminuir tanto la pérdida de audición, como la sintomatología del tinnitus. La evidencia epidemiológica sugiere además, que todas las personas de edad avanzada deben tomar una cantidad de 100 mg diario.
El Triptófano es captado por las neuronas que lo utilizan para la síntesis de serotonina. Es esencial para que el cerebro produzca serotonina, un neurotransmisor cerebral; como inductor del sueño, ya que la serotonina es precursora de la hormona Melatonina, que regula el ciclo diario de vigilia-sueño. Efecto analgésico, este aminoácido empieza a ser utilizado para el dolor; el tipo de dolor que puede mejorar es el dolor de cabeza, debido a que el triptófano y la serotonina son necesarios para el buen funcionamiento del núcleo de rafe.
El Zinc es un oligoelemento esencial que se encuentra en pequeñas cantidades en las células. El IDR de zinc en los adultos es de 15 mg. La mayor parte del contenido de zinc en los seres humanos está unido a las proteínas de los tejidos. En el plasma, el zinc se une principalmente a la albúmina; menos de 2% de zinc se encuentra libre. El nivel de zinc en el suero no es el mejor parámetro, pero es el más fiable para evaluar el equilibrio de zinc en el cuerpo. Cerca del 99% de zinc total se encuentra, en el interior de las células. El resto está en plasma y fluidos extracelulares. Se ha demostrado en diferentes estudios que la carencia de este mineral a nivel vestibular, puede ser la responsable de los acúfenos, y se relaciona con la edad avanzada.
La Vitamina B6 es una coenzima implicada en el metabolismo de hidratos de carbono, grasas y proteínas, y en la fabricación de hormonas, células rojas de la sangre, neurotransmisores, enzimas y prostaglandinas. También se requiere para la producción de serotonina, un neurotransmisor que controla el estado de ánimo, el apetito, los patrones de sueño, la sensibilidad al dolor y acúfenos.

EL VÉRTIGO
Es la sensación de que nosotros o nuestro entorno se está moviendo cuando no hay movimiento real. Puede sentir desequilibrio, giros, o inclinación. Con el vértigo severo, se puede sentir náuseas y vómitos. Podemos tener problemas para caminar o estar de pie, y podemos perder el equilibrio y caer. El vértigo es a menudo provocado por un cambio en la posición de la cabeza.
El vértigo suele ser resultado de un cambio repentino o temporal en la actividad de las estructuras del equilibrio en el oído interno (sistema vestibular) o en las conexiones de las estructuras de balance cerebral. Estas conexiones detectan el movimiento y los cambios en su posición de la cabeza. A veces, el vértigo es lo suficientemente grave como para causar problemas de náuseas, vómitos y balance. Pero, la buena noticia sobre el vértigo es que por lo general no dura mucho tiempo. Dentro de un par de semanas, el cuerpo normalmente se adapta a lo que está causando su vértigo. Generalmente se necesita tratamiento médico.
Existen varios tipos de vértigos:
Vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB), La inflamación en el oído interno, Vestibular migraña, Enfermedad de Meniere, El neuroma acústico, etc.
Mareo es la sensación de que estás a punto de desmayarse o "perder el conocimiento." El mareo con frecuencia desaparece o mejora cuando nos acostamos. Si el mareo empeora, puede producir una sensación de desmayos o casi un desmayo (síncope ). A veces se puede sentir náuseas o vomitar cuando está mareado.
Aunque el mareo puede ocurrir en personas de cualquier edad, es más común entre los adultos mayores. Es común a sentirse mareado de vez en cuando. Breves episodios de mareos no son generalmente el resultado de un problema de salud. El mareo con frecuencia es causado por una caída momentánea de la presión arterial y el flujo sanguíneo que se produce en la cabeza cuando ésta se levanta demasiado rápido, después de estar sentado o acostado ( hipotensión ortostática ). El mareo continuo puede significar que tenemos un problema de salud, que necesita ser evaluado por su médico.

IDEOCALM:
Gingko biloba: El extracto de Ginkgo biloba, por su acción antioxidante neutraliza los radicales libres de oxígeno e hidroxilo que se ven aumentados en la isquemia de los tejidos. Las membranas vuelven a ser permeables para permitir a las neuronas cumplir con su acción de nutrición, por lo que se favorece la captación de glucosa, se normaliza el consumo de oxígeno y se aumenta la síntesis de ATP. El extracto de Ginkgo biloba mejora la microcirculación cerebral. Ha sido ampliamente investigado en todo el mundo y ampliamente utilizado en vértigos, mareos y acúfenos. Además nuestro Ginkgo biloba viene asociado de lactonas, lo que hace del producto mucho más completo.
Triptófano, magnesio y vitamina B6: Una de las principales causas de Mareos, vértigos e inestabilidad, son la crisis de ansiedad y depresión nerviosa. Se ha comprobado en diferentes estudios que este tipo de pacientes, tienen carencia de serotonina. La asociación de triptófano, magnesio y vitamina B6 hace que se active nuestra serotonina, y posteriormente la melatonina natural. Actúan como reguladores del sueño con efecto no sedativo.
Los pacientes con acúfenos no entienden lo que les pasa porque no es tangible. El acúfeno, en consecuencia, no puede medirse, pero sí puede evaluarse su repercusión en la vida del paciente. Los acúfenos generan en la persona afectada un estado de ansiedad de grado variable y éste, a su vez, los modifica de tal forma que, a mayor intensidad del ruido, mayor ansiedad y viceversa. Puede ser percibido por uno o los dos oídos. El sonido puede tener características de zumbido, timbre, silbido o cualquier otro tipo de ruido.
Según la American Tinnitus Association (ATA), el acúfeno grave, representa, tras el dolor intenso y los trastornos del equilibrio, el tercer síntoma más incapacitante que puede sufrir el ser humano. El acúfeno es un motivo de consulta frecuente; un 7% de la población ha consultado alguna vez a su médico de atención primaria por este motivo.
Puede aparecer como un síntoma secundario a casi todos los procesos del oído. Generalmente suele ser bilateral, cuando es unilateral predomina en el lado izquierdo. La hipoacusia, es el tercer problema de salud más frecuente en la tercera edad, tras la artrosis y la hipertensión; siendo la prevalencia de hipoacusia tan alta y puesto que existe una clara relación entre la pérdida auditiva y la génesis del acúfeno, se estima importante a la presentación de este síntoma. Los acúfenos son más frecuentes en la tercera edad, probablemente por su relación con la hipoacusia y con la mayor exposición a ruidos externos.
En los últimos años se está produciendo una importante evolución en el concepto y teorías fisiopatológicas del acúfeno. La etiología de la lesión auditiva definía el tipo de acúfeno. Las alteraciones en las estructuras laberínticas o del nervio auditivo constituían los llamados acúfenos periféricos frente al acúfeno central, cuya etiología se originaba a partir de lesiones en niveles superiores (patología cerebrovascular, degenerativa o neoplásica). En la actualidad los avances en la fisiología cerebral y en el apoyo de la neuroimagen funcional están redefiniendo el concepto del acúfeno. El acúfeno está pasando de ser un fenómeno puramente coclear a considerarse una manifestación del sistema nervioso central (SNC); una alteración en los sistemas de compensación de las vías auditivas centrales frente a una agresión generalmente periférica.
Cualquier desequilibrio a lo largo de la vía auditiva afecta tanto la función coclear bilateral como el procesamiento de señales relacionadas con el sistema nervioso, y es susceptible de generar la percepción de un sonido fantasma.
